El negocio de tener una farmacia o trabajar en una está muy bien considerado. El caso es que dispensar medicamentos u otro tipo de productos de farmacia tiene una responsabilidad importante, ya que se puede poner en juego la salud de las personas. Esto hace que para poder trabajar en una farmacia se debe contar con una formación específica, debiendo tener además una cierta capacidad para las ventas, así como de vocación de atención al cliente.
¿Qué requisitos hay que cumplir?
Es posible tomar dos caminos, una es cursar el grado de farmacia o conseguir el título técnico en farmacia y parafarmacia. Lo que debes tener claro es que si quieres regentar un establecimiento farmacéutico es fundamental tener carrera universitaria.
Si se quiere ejercer como tal, hay que tener el título de Técnico en farmacia y parafarmacia. En este caso hay que estudiar el grado medio de formación profesional.
En este grado medio lo que se aprende es la disposición y venta de los productos de la farmacia y parafarmacia, además de cómo funciona una farmacia, las operaciones de laboratorio, fórmulas magistrales, anatomía y patología básicas o primeros auxilios por citar algunas.
Este título da derecho a trabajar en farmacias y parafarmacias, farmacias de hospitales o almacenes de medicamentos. Suele ser una buena oportunidad para trabajar en un negocio estable y de los mejores empleos para ese tipo de formación.
La carrera universitaria de farmacia
Si quieres abrir y regentar tu propia farmacia tienes que estar colegiado en algunos de los colegios profesionales, lo que implica estudiar el grado universitario en farmacia. Los profesionales farmacéuticos son los que dan consejos a los pacientes sobre los medicamentos que deben tomar y sus efectos.
Además, pueden ejercer en más áreas profesionales dependiendo de la especialización, tanto en laboratorios farmacéuticos como en hospitales o en la industria cosmética.
En Farmacia Nou Campanar tienen gran experiencia y son muy conocidos en su área de influencia. Destacan por su gran atención al público y asesoramiento. En este sentido las farmacias tienen que ser muy cuidadosas.
Vamos a conocer una serie de consejos que deben saberse sobre la atención al cliente en farmacia:
Todo negocio debe ir encaminado a que los clientes queden satisfechos. En las farmacias, el porcentaje es incluso mayor, porque todos los que entran no son solo clientes, son pacientes. El público espera un trato atento y personalizado. Su importancia es alta y por ello hay que darle la importancia que merece.
El trato que se ofrece dice mucho de los profesionales que trabajan en la farmacia. Es necesario mostrar empatía con el cliente, confianza y seguridad. No solo se vende un producto, se da la solución que palíe un problema o lo cure.
De todo esto podemos extraer que los beneficios que se tienen en la farmacia de una buena atención al cliente es la fidelización de los clientes. Además de esta fidelización, también se consigue que la farmacia en cuestión se diferencie de la competencia, por lo que puede llegar a posicionarse como referente en la zona y potenciar sus ventas enormemente.
Si se quiere conseguir una buena atención profesional, lo principal es formar un buen equipo, Para ello , se deben esforzar la regencia para que todo el equipo cuenta con la formación sobre las diferentes áreas que puedan corresponder a los profesionales y los tipos de productos que se ofrecen. En la formación de carácter técnico, también adquiere gran importancia tener una buena formación en técnicas de venta, negocio o hasta psicología.
Podríamos decir que en las farmacias y más concretamente para ser farmacéutico hay que no solo contar con unos requisitos establecidos y una formación clara, también hay que tener cualidades de lo más variado. Se debe ser, por así decirlo, un poco comercial, un poco psicólogo, saber escuchar y asesorar.
Está claro que una farmacia es un lugar importante donde los clientes buscan curarse o solucionar sus problemas. Por lo general las personas confían en los profesionales y los fallos no están permitidos y pueden tener consecuencias graves para los usuarios, por lo que es lógico que tengan ciertos requisitos, los cuales aumentan si lo que se quiere es tener una farmacia en propiedad