Hace unos días tuve la gran suerte de dar por fin con un coche de importación que deseaba traerme a España para disfrutar de él. Un Mustang, el vehículo con el que soñaba desde pequeño. Lo cierto es que había estado detrás de ese modelo en concreto durante varios años, y bien por el precio del mismo así como por las dificultades para traerlo con garantías a Benicarló no me había decidido. Al final, un buen amigo me comentó que podía confiar en Transportes Transthalia, una empresa de calidad de vehículos por carretera, y ya lo tengo en casa y en perfecto estado. Tan contento estaba que decidí celebrarlo con una comilona donde destacó una receta: los buñuelos dulces de garbanzos.
Y es que tenía bien claro que quería celebrar este acontecimiento, ya que llevaba muchos años dando la paliza a mis amigos con este deseo y ellos se merecían que lo compartiese con un pequeño banquete en el jardín de mi casa. Además, aquí, en Benicarló, la meteorología se presta a ello. Pues bien, busqué un montón de recetas que tuviesen que ver con la dieta mediterránea y hubo una de ellas, que saqué del libro La cocina de las legumbres, que triunfó por encima de todas, los buñuelos dulces de garbanzos.
Además, las legumbres son una fuente de salud casi infinita y aportan inmensos beneficios a nuestra salud, como pueden ser la reducción del colesterol o de las enfermedades relacionadas con el corazón, por eso nos conviene usarlas mucho en nuestra dieta diaria, algo de lo que puede hacer gala la dieta mediterránea, esta estilo de vida tan saludable que llevamos en nuestro país quienes deseamos cuidarnos. De hecho, son tan importantes que el año 2016 ha sido declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas Año Internacional de las Legumbres, calificadas por las instituciones sanitarias como el gran súper alimento del futuro.
Pues bien, os dejo la receta para que podáis hacerla también vosotros en cualquier celebración.
Receta de buñuelos dulces de garbanzos
Ingredientes para 1 pers.:
200 g de garbanzos cocidos
200 ml deleche
50 g de harina de maíz
2 huevos
60 g de mantequilla
3 g de levadura química
1 c. p. de azúcar
Un poco de ralladura de piel de naranja y limón
Azúcar para rebozar
Canela en polvo
Aceite oliva virgen extra
Elaboración:
- Escurrir las legumbres. Reservar.
- En una cazuela, calentar la leche con la mantequilla y el azúcar. Cuando la leche empiece a hervir, apagar el fuego y añadir los garbanzos cocidos.
- Triturar todo junto en la batidora hasta conseguir una masa sin grumos. Colarla y reservar.
- Poner la masa a fuego suave e ir añadiendo la harina lentamente al mismo tiempo que se remueve. La masa se irá despegando de los bordes del cazo hasta quedar como una pelota.
- Retirar del fuego y dejar enfriar un poco.
- Añadir un huevo a la masa y batir para integrar el huevo con la masa.
- Cuando el huevo se haya integrado añadir el segundo huevo y volver a batir. Añadir la piel de naranja y limón.
- En un cazo calentar el aceite. Hacer pequeños buñuelos con ayuda de dos cucharas o escudillándolos con una manga pastelera.
- Freír a fuego medio hasta que estén dorados.
- Escurrir los buñuelos con una espumadera sobre un plato con papel absorbente.
- Antes de que se enfríen, rebozar con azúcar y canela.