Las costas mediterráneas españolas, una potencia logística

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España presenta varias ventajas que le hacen ser un país altamente competitivo en lo que guarda relación con el intercambio de mercancías y su distribución. Nuestro país es, en primer lugar, la puerta de entrada a Europa, por lo que muchos de los productos que los europeos traemos de allí pasa por alguno de nuestros puertos y desde allí se distribuye al resto de la Península. Pero España es una potencia, a su vez, porque tiene una amplia salida al mar Mediterráneo, lo que también es fundamental para la cantidad de mercancías que nuestro país pueda recibir.

Pero es evidente que de nada sirve recepcionar esas mercancías si después no contamos con los medios que son imprescindibles para hacer que esas mercancías se muevan rápido y de un modo eficiente por nuestras carreteras, nuestras vías férreas o incluso nuestro espacio aéreo. Ese es el reto que tenemos en España para tratar de construir un sector logístico y de transporte cada vez más eficiente, una de las necesidades más imperiosas que necesitan las empresas de nuestro país.

El Confidencial Digital publicó hace ahora un año un artículo muy interesante en el que hacía referencia a la importancia de la logística para las empresas actuales y en el que también hacía incidencia en la necesidad de abaratar los costes asociados a ella a fin de que las empresas consiguieran cada vez una mayor rentabilidad. Sin embargo, ese artículo dejaba clara una cuestión central: la importancia de la logística reside en el beneficio que obtiene de ella el cliente final, un beneficio que puede ser desde una temprana recepción de la mercancía pedida o una distribución eficiente de la misma.

Teniendo todo esto en cuenta y empezando a atar cabos, nos damos cuenta de que la zona mediterránea española presenta unas características que pueden llegar a ser muy propicias en relación con el tema logístico y de transporte. En efecto, la costa mediterránea dispone de una gran cantidad de puertos, alguno de ellos de primer nivel europeo, como los de Barcelona o Valencia. Al mismo tiempo, la zona está bien comunicada por carretera y, para acabar, dispone de un proyecto de conexión ferroviaria denominado Corredor Mediterráneo. El transporte de mercancías es una realidad plural en esta zona de nuestro país.

La zona mediterránea es, sin lugar a dudas, una de las más preparadas para hacer frente, dentro de un país como España, al reto que implican las nuevas necesidades de logística y transporte. Así lo han deducido los profesionales de Stock Alpha, una empresa especializada en este sector y que destaca que Madrid y las zonas costeras mediterráneas son las mejores para labores como el almacenamiento y la distribución o el transporte de mercancías. Desde Stock Alpha destacan, en efecto, la facilidad con la que se opera entre la capital de España y cualquiera de los puntos que dan al Mediterráneo en España. Y esa es una de las claves para garantizar la rentabilidad en el sector.

Un sector que, poco a poco, tiende al alza

El negocio relativo al transporte viene creciendo durante los últimos años. Los datos así lo atestiguan. Un artículo de Cadena de Suministro aseguraba, hace un par de años, que el número de empresas dedicadas al transporte por carretera había crecido durante el mes de mayo de 2016 con respecto no sólo al mes anterior sino también con respecto al mismo mes del año anterior, datos que reflejan que este ha sido un crecimiento continuo y que parece tener futuro y continuidad de cara a los próximos años.

Lo mismo ocurre en el caso de la logística. Las empresas dedicadas al almacenamiento o la manutención han crecido y se ha aumentado de manera considerable el número de personas a las que emplea el sector. El porcentaje que aporta el mismo al Producto Interior Bruto también se ha elevado y, por tanto, da la sensación de que ya hemos terminado de salir de la crisis en lo que respecta a este campo. Seguir trabajando en que ese aporte del sector a la economía española siga subiendo será la mejor manera de mantener la tendencia.

Las costas catalanas, las valencianas, las murcianas y parte de las andaluzas seguirán recibiendo miles de toneladas de productos cada año. Y para que toda esa mercancía sea perfectamente distribuida hacen falta manos y empresas comprometidas, empresas que, por otra parte, pueden ser de cualquier región de nuestro país. Ser capaces de tener una dinámica y una rutina en lo relativo a este trabajo tendrá un valor capital a la hora de conseguir un sector eficaz y eficiente.

 

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